viernes, 25 de septiembre de 2009

Desorden.


Si padeces de mareos y demás lo mejor será que dejes este texto, me temo que hoy no tengo ningún sentido claro y reconocible así que esto va a ser un batiburrillo sin Biodramina y a prueba de curvas. Todo da vueltas y vueltas y vueltas, pero nada se mueve y todo se estanca.

El mar está en las ventanillas de los aviones en los que volé y por mucho que te digan después de la noche no siempre viene la mañana. Que despago ¿verdad? Tras la tormenta odio la calma ralentizada de buenos modales porque es casi tan falsa como decir "todo era mentira y lo dije sin querer" y tras las vacas gordas nunca espero las flacas. Esto no es ni muy curioso ni muy extraño, esto solo es otra posibilidad. Si tienes que gritar grita, prometo no correr. Porque seguro que me alcanzas y entonces a ver qué coño hago con las lágrimas. ¿Dónde se guarda la lluvia? ¿Dónde me meto lo que nadie quiero que vea? Los humanos venimos muy bien remendados de fábrica, tenemos los bolsillos internos de las chaquetas y los del alma, si cada cual le sacara el polvo a estos últimos veríamos la cantidad de Mierda Vs Confeti que logramos extraer, y os aseguro que la primera ganaría con creces a la segunda, por desgracia. Por eso a veces hacemos cosas muy auto-destructivas, como lamernos las heridas hasta donde nos llegue la lengua o llorar mares por quien no nos merece. lo haces, Yo lo hago, Ella lo hace y el de más allá también, por mucho que se las dé de poderoso. Puedes hacer lo que te dé la gana pero cuando te digo que esto es peor que pintar con la zurda es porque por mucho que me esfuerce nunca encontraré unas buenas esposas para mi con nadie. Y cuando ello empiece a suponerme un problema ya veré qué hago...¿No te parece? Las prisas nunca fueron buenas para arrancar el motor de un corazón con insomnio porque lo hacen funcionar a golpes y palazos, las prisas siempre acaban por forzar las arterías y finalmente el corazón se hiperventila y estalla en mil temores, algunos más claros que otros. Por la megafonía del alma suena el silencio más ruidoso de todos: tu voz, mi voz, sus voces, tus ecos, sus gestos, aquellas palabras, mis latidos, los tuyos, sus miedos, los míos, los gritos, tus susurros, mis "lárgate", tus "quédate", tus "márchate", mis "hasta nunca".Todo a la vez. Que tú puedes. Que yo puedo.

A veces hacer lo correcto no es hacer no que dice el corazón, ni mucho menos la cabeza, a veces lo más justo es hacer lo que te pida el momento y si el momento te pide piernas te marchas, si te pide codos aterrizas y si quiere pestañas parpadeas. Tú eliges, como siempre.

5 comentarios:

  1. Siempre es un placer leer tus(sus) publicaciones, señora.

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  2. Un beso. O un abrazo. O las dos cosas. Idem para la rubia. Dile que active los comentarios anda.

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  3. Gracias a los tres (sonrío), ya sabeis que soys mejor que bienvenidos a este pequeñito espacio.
    Gabriel, para conocerme vas a tener que leerme mucho! He de pasarme por tu blog...para hacerte una visita y saber un poquito de ti, que me llevas ventaja ;D
    Y...¿de qué rubia y comentarios estaríamos hablando?

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  4. Ni mucho menos...a veces hacer lo correcto es ser tan miedica como te pida el cuerpo ¿verdad? Ay, que ya sabemos de lo que hablamos....

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