martes, 26 de mayo de 2009

Ausencia, Lisboa, café y Cándida.



La ausencia tiene olor a café y se parece a Lisboa.

¿Porqué, verdad? Porque cuando era más (mucho más) pequeña mis padres antes de irse a trabajar tomaban café en la cocina, luego se marchaban y junto al poso de azúcar la ausencia era todo lo que quedaba en sus tazas y en la casa entera. Y lo de Lisboa... eso es otra piedra en la historia; Lisboa es hermosamente triste y rara.
Ya te has perdido cien mil domingos conmigo, cien mil minutos de cine sin anuncios y cien mil segundos de mirarnos por mirar, por vicio y por mojarnos como galletas, mirarnos porque no echan nada más espectacular en ninguno de los medios del mundo y nosotros somos ahora, con total seguridad, lo más interesante de nuestra calle. Y un día me arrepentiré, te arrepentirás...me refiero a uno de esos días en que uno es más mayor que el día anterior, y entonces se plantea de cuantas cosas podría arrepentirse mañana y de qué forma sangran las heridas hoy. El día que te lamas las heridas yo habré perdido las vergüenzas y miraré de frente el espectáculo, y tú me buscarás entre tus estanterías deseando que no te vea caer tan bajo y tan desnudo.Todos tenemos, aunque a ti no se te note, un bolsillito en las costillas, y ahí guardamos todas las cosas bonitas de las que Cándida hablaba en su película, ahí reside la felicidad en polvo y en virutas. Hay personas que nunca tiran de sus hilos porque mirándote a los ojos saber decirte tanto que no es necesario que articulen nada más ni rompan sus costuras, pero solo son algunas personas, y tú no eres una de ellas. Te prometo que desde mi bolsillo se ven las cosas más bonitas del mundo, y que si quieres y te animas un día te hago hueco en mi balcón, con vistas a Lisboa.


La de la foto es Cándida, y es una mujer excepcional.

2 comentarios:

  1. Te seguía en el Space y llegué el otro día para leer el montón de cosas que me temía pendientes y ¿qué es lo que veo? ¡Que te has mudado!, menos mal que me avisaste y me dejaste la dirección...que sinó te mato a e-mails jajajaja. Esta casa es bien bien bien bonita, como la de antes...la veo más simple, eso si, pero mucho mejor ¿Verdad?
    Voy a empacharme de tus textos, que es la hora de la merienda :)
    Anita Donegal.

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  2. A mi también me encantó Cándida, excepcional sin duda alguna ¿verdad?.
    También tu Lisboa debe de ser preciosa, y tu balcón...¿cuando vale el alquiler?
    Nacho.

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