sábado, 21 de marzo de 2009


Un día escribiré una canción de amor, y cuando ponga el punto final a la última estrofa quedaré tan realizada que las arterias darán un centenera de vueltas, sacaré de su orbita a los pulmones y los ojos tendrán visión 365º. Cuando lo haga, si es que lo hago, cruzaré en rojo todos los semáforos y me despediré de dormir en habitaciones de hotel, siempre me ha parecido que sus sabanas punzan demasiado, sus armarios son demasiado profundos y en sus cajoneras nunca hay nada de lo que necesito.
No tengo nada, pero siempre revuelvo en mis bolsillos. Y creo…creo que a veces es mejor salir sin vida del último bar y la antepenúltima copa.

3 comentarios:

  1. Si la escribes ¿La podré leer?
    Y si, muchas veces es mejor salir sin vida de muchos lugares... pero tiene su pimienta arriesgarse.
    Bú!

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  2. ¡Brillante!
    Yo he salido muerta ya de un par de bares... y no me va mal ;)

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  3. Uy uy uy...una vez también yo me propuse hacerlo, contaba con la armonía de la guitarra pero me faltaba amor y letra. Tengo una idea...yo pongo la música y tú la letra (mierda, ha quedado como la película) y a ver que sale. Piénsalo! Jajajaja...podría ser un éxito personal y los dos saldríamos ganado.¿Te encuentras mejor con la primavera o aún te apedreas con ella?
    Un beso!

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