domingo, 31 de mayo de 2009

Sujeto con pinzas de tender.


Sol, una tapa al viento versión 2 por 12 de mucho día solo para los dos. Tú, Yo, hoy vamos a despilfarrar hasta dejar de saber contar con los dedos. Vamos a llegar al millón setecientos trenta y siete, y medio-periodo. Suena a siete vueltas a las manecillas de tu reloj, que es el que marca mi tiempo, y como suena a estribillo me encanta aún más. "Vaya unas cosas más raras tienes...". Pero sonríes, y entonces me importa un ovario lo raro que haya sonado. En camiseta de manga corta, la mía blanca-básica, la tuya verde-con-ganas. Yo casi no hablo porque ya sabes lo mucho que me gusta mirar por la ventanilla, tu ventanilla, yo casi no hablo pero tú siempre sabes lo mucho que estoy pensando-te-nos-me; te miro de reojo y sonrío, como uno de esos niños que miran sin miedo a los ojos, como cuando ya no queda nada que perder salvo un pendiente o los dos últimos chicles de la cajetilla. Pero en verdad me queda por perder desde la goma del pelo al bikini, pasando por las zapatillas sin papeles y la cartera sin cordones. También el verbo reÑir debería perder la letra del medio porque lo que queda luego es mucho más bonito, pero la RAE ,que es muy seria y correcta, nunca acepta mis peticiones y eso que siempre les pongo unos bonitos tacones y les perfilo los labios... Tú apoyas la mano sobre mi pierna, y solo cuando tienes que cambiar de marcha te ausentas…pero regresas tan rápido que casi no me da tiempo a extrañarte más de lo normal. Y una carretera de esas que no parecen tener fin o no otro más allá de la luna bien llena. Bien llena de algo, como una cucaña llena de fines de semana. Si, una carretera de 366 días, no me fastidies, puestos a pedir: que el año sea bisiesto.
¿Vale?

Todo esto venía por algo...
¡Ah si! Porque no sabes cuanto me molesta que pongas a esta vida como excusa para la próxima, no sabes ni sabrás cuanto me jode aguantarme las ganas de comerte esas palabras.Que se calle todo ese puto ruido que te rellena, por favor. Que lo único que quiero es tu sonido, y para ese aún no me has regalado unos buenos cascos.

jueves, 28 de mayo de 2009

Vértigo.



- ¿En qué piensas que llevas tanto rato ahí quieta?

-En todo lo que nunca sabrás y te perteneció. En todo aquello de lo que formaste parte sin copyright. En todo lo que nunca sabré y sin embargo ahí está, revolviéndose en mundos paralelos a X años luz de ahora, mezclándose con miradas que no les pertenecen y siendo escuchadas por personas que jamás lo entenderían como podrías hacerlo tú, o quizás yo; palabras enmarañadas con alguna que otra canción de Norah Jones, el humo de un par de cigarrillos y dos bocadillos vegetales. El otro día pensé en todo aquello que nunca leería, ni escucharía, ni sabría, ¿te imaginas que alguien en algún lugar del mundo ha escrito sobre ti? Que ha llenado las hojas de su diario con tu nombre y ha manchado veinte entrada de su blog pensando en tus hombros. Que escribió tu nombre en los márgenes de las libretas y en las hojas en blanco que nunca usó; y luego imaginó como quedaría su nombre junto al tuyo. Persona que soñó con darte los buenos días, con decir “Jesús” después de que estornudaras, con abrazarte cuando los exámenes te apretaran el cuello y no tuvieras donde sujetarte porque estaba todo inundado de quehaceres, con mirarte mientras dormías o mientras preparabas una ensalada, con calzarte por las mañanas cuando la malagana no está ni para hacer nudos. El mundo está lleno de detalles tan tontos como estos, que alguien piense en ti y tú nunca lo sepas. En el montón de palabras que alguien decidió guardarse en vez de contarte...

Le quieren enseñar al padrecito a rezar el Padre Nuestro.



-Oye Prima, ¿Tú crees en los marcianos?
-Yo si ¿y Tú?
-Yo es que ya tengo ocho años y el cura me ha dicho que solo he de creer en Dios.
-Vaya…pues yo tengo veinte años así que tampoco debería creer en los marcianos ¿no te parece?
-“Alamejor” es una nueva ley. ¿A ti te dejaron creer en Harry Potter?
-Es que, Luis, para cuando yo tomé la comunión Harry aún no existía.
-Pues ahí está, Don Antonio ha dicho que nada de nada de marcianos pero no ha dicho nada de que no podamos creer en Harry Potter así que tú no digas nada a nadie y así de mayor podré ser como él, un mago.
-Oye… ¿y tú para qué quieres ser mago, si se puede saber?
-Para poner una nueva ley, para los marcianos.
-¿Y por qué no le has dicho a Don Antonio que tú si crees en los marcianos y ya está?
-Porque él dice que dice la palabra de Dios y que Dios anda por caminos “inexcutables”.
-“Inexcutables”…
-Sí, que nunca sabes por dónde te va a salir.
-Ya… ya veo.
-Es que imagínate que un día se me aparece en el pasillo de casa, con su barba, y va descalzo ¿sabías tú que iba descalzo? Yo no sé porqué la abuela dice eso de “dónde Cristo perdió las zapatillas” si no tenía, el pobre, seguro que lo pasó más mal que mal…. Bueno pues va y se me aparece y me dice algo.
-¿Tú qué le dirías?
-Amén.
-¿Y ya está?
-Es que el Credo aún no me lo sé…
-Pues ánimo Luisito que es bien largo.
-¡Bua! ¡Mogollón! Fijo que me suspendería y no me dejaría tomar su comunión. ¿Yo cuando me bautizaron no me sabía ni siquiera el Padre Nuestro?
-¡¡Pero si no sabias ni hablar!!
-Ay no sé… yo no me acuerdo de nada. Pero la abuela siempre dice que estaba guapísimo y que la mamá lloró de verme tan guapo. Llevaba un disfraz blanco y un gorro muy raro, más feo todo... ¿tú te acuerdas prima?
-Sí, ibas de bebé.
-¿Y seguro que no dije nada?
-Que noooooooooooo.
-No me lo creo prima.
-¡Uy! ¿Por qué?
-Porque no es la palabra de Dios.
-Dejate de hostias Luis que..
-¡Uy lo que ha dicho! ¡Lo que ha dicho! ¡Penetencia te va a tocar hacer!
-Penitencia Luis, con "i". La "penetencia" es lo que hacen los curas.
-...
-(risas).
-¿De qué te ries tú ahora? ¿No se te da bien la religión? ¿La suspendiste en la UJI y no se lo has dicho a la tia? Te va a castigar un montón; a mi me ha pasado eso con Naturales.
-Yo es que soy más de ciencias...

martes, 26 de mayo de 2009

Ausencia, Lisboa, café y Cándida.



La ausencia tiene olor a café y se parece a Lisboa.

¿Porqué, verdad? Porque cuando era más (mucho más) pequeña mis padres antes de irse a trabajar tomaban café en la cocina, luego se marchaban y junto al poso de azúcar la ausencia era todo lo que quedaba en sus tazas y en la casa entera. Y lo de Lisboa... eso es otra piedra en la historia; Lisboa es hermosamente triste y rara.
Ya te has perdido cien mil domingos conmigo, cien mil minutos de cine sin anuncios y cien mil segundos de mirarnos por mirar, por vicio y por mojarnos como galletas, mirarnos porque no echan nada más espectacular en ninguno de los medios del mundo y nosotros somos ahora, con total seguridad, lo más interesante de nuestra calle. Y un día me arrepentiré, te arrepentirás...me refiero a uno de esos días en que uno es más mayor que el día anterior, y entonces se plantea de cuantas cosas podría arrepentirse mañana y de qué forma sangran las heridas hoy. El día que te lamas las heridas yo habré perdido las vergüenzas y miraré de frente el espectáculo, y tú me buscarás entre tus estanterías deseando que no te vea caer tan bajo y tan desnudo.Todos tenemos, aunque a ti no se te note, un bolsillito en las costillas, y ahí guardamos todas las cosas bonitas de las que Cándida hablaba en su película, ahí reside la felicidad en polvo y en virutas. Hay personas que nunca tiran de sus hilos porque mirándote a los ojos saber decirte tanto que no es necesario que articulen nada más ni rompan sus costuras, pero solo son algunas personas, y tú no eres una de ellas. Te prometo que desde mi bolsillo se ven las cosas más bonitas del mundo, y que si quieres y te animas un día te hago hueco en mi balcón, con vistas a Lisboa.


La de la foto es Cándida, y es una mujer excepcional.

viernes, 8 de mayo de 2009

Dualidad.


Tú no me entiendes porque eres demasiado joven.
Yo no lo concibo porque ,textualmente, “no he vivido tanto como tú”.
Tú no puedes ponerte en mi lugar porque te falta experiencia.
Yo no puedo hacerme escuchar porque has perdido audición.
Tú eres demasiado inocente y aún hueles a recreo.
Tú estás podrido por dentro y de nada te sirve el Channel Egoiste Platinum.
Tú te crees que hablando se llega lejos.
Yo me echo las manos al cuello cuando crees no tener nada que decir.
Tú eres un batiburrillo de demasiada personalidad.
Yo no me conformo con ser esa chica Marie Claire de tus portadas.
Tú no tienes ni idea de lo que vende y triunfa a día de hoy.
Yo no vendo, solo compro o intercambio.
Tú no sabes de negocios y apuestas al por mayor.
Yo solo sé que te arrepentirás de tu escrupulosidad y tus apuestas de casino.
Tú no tienes ni idea y te vas a llevar muchos palos.
Y tú no sabes vivir porque estás lleno de hostias mal curadas.

Ahora creo que está demás deducir quién saldrá ganando de este intercambio de impresiones. Puedes quedarte dormido con tu cigarrillo encendido, con suerte lo máximo que arderá entre las paredes de tu habitación serán las cortinas por culpa de alguna colilla mal apagada; Yo prefiero darme de frente con un montón de puertas más y que cuando el incendio suceda no me pille dentro. Puedes sentirte molesto por mi falta de compasión, pero me has destilado las ganas de ayudarte por dentro y lo único que me quedan son un par de frases pisotón y pellizcos de monja. ¿Y qué si pierdo? ¿Y qué si gano? ¿Acaso vas a enseñarme Tú a saber llevar cualquiera de las dos situaciones?
No te atrevas ,no, porque hoy estoy tan enfadada contigo que ni la mejor de tus caladas de Padre van a sacarte de este pozo de mierda.

jueves, 7 de mayo de 2009

Probable-Mente.


Que bien estás con las piernas extendidas sobre la mesa,con esa carita tan desfaenada, que bien te sienta el sol en los omóplatos y la manga corta en las caderas, la luna en tanga brasileño y el sol haciendo topless, los helados de vainilla en la terraza y las claritas de limón en la plaza grande. Los ocasionales lunes de fiesta y los viernes de pachanga, los sábados mojiteros y el canal porno entre los amigos hormonados, la pelada de cacahuetes multitudinaria y la subida de alcohol en los mofletes. Que guapa te veo ahora que se suda hasta duchándose, que gracia cuando te abanicas con tan poca gracia y tanto desparpajo, cuando rechinan tus tobillos de bailar hasta los claxons de los autobuses y cuando te quejas sin cesar porque no quedan fresas en la nevera. Que ya no es tiempo, te lo he dicho muchas muchas veces; no es tiempo ni de fresas ni de echarse a llorar.
Me estoy muriendo porque no logro hacerte entender que no nos vemos si no nos salimos de nosotros. Respiro. A ver...hay gente de fuego sereno, que ni se entera del viento, y gente de fuego loco, que llena el aire de chispas y garabatos. Algunos fuegos, fuegos bobos, no alumbran ni queman; pero otros arden la vida con tantas ganas que no se puede mirarlos sin parpadear,y quien se acerca, se enciende. ¿Así mejor? ¿Me explico un pelín mejor?
Yo se que no del todo, pero qué quieres...cada vez me dan más abrazos con el velcro girado, más recuerdos de pirateria, cada vez siento más la boca en un puño y que todo lo que me dijiste era lluvia de la buena, chaparrón del fuerte. Pero ya sabes, lo que no me mata me hace más pirata.

domingo, 3 de mayo de 2009

La boca en un puño.


Te prometo que lo he intentado, tanto que me han llegado a sangrar los pensamientos de tanto forzarlos, tanto que las ganas se han sacado los ojos y me han dejado ciega de razón y ocupaciones, tanto que no me quedan suspiros para llenar mis esquinas vacías de nada y otoños. Ya no se si "tanto" es la palabra más adecuada, me has dejado tan vacía que resueno hasta en los conciertos de mp3, soy una cucaña de silencios y a la que estires de mi cuerda va a saltar mi sinfonía de congelador. Si, eso me pasa por dentro, sueno como la nevera, como ese ruido que lo único que manifiesta es que hay algo ahí cuando por las noches todo se calla, algo que está conectado a la luz y mantiene un montón de cosas frías dentro,cosas con caducidad y aditivos. No sé, yo no se estar triste contigo, yo no sé pensar en ti y añicar mis ojos, yo solo se mirarte y hacerme grande y bonita. No me veo llorando por verbos como "marcharse" "alejarse" "distanciarse" o "morir", me veo sacándole los dientes a "arañar" "crecer" y "beber", haciéndole un simpa a "llorar" "pagar" y "pegarse". A mi el descaro me asoma por el borde del pantalón y a la que me doy cuenta me estoy pisando hasta los calcetines de fiesta y modales...más los días de lluvia ,manta y patatas fritas. Pero me falta algo, y ese algo me está atravesando las pupilas con su eco, me está dejando la piel de gallina por dentro y ,dentro de nada, cuando quiera hechar a volar tendré tanto acero en las venas que lo único que se alzará en mí serán las ganas de tirarme al suelo.
Cuando toque el asfalto contaré hasta siete, y si antes del cinco no me has quitado el tapón del ombligo no pienso volver a calar en tí como la lluvia.